“Comunicado oficial de la Asociación Nacional de Estudiantes de Química y Farmacia”
Referente a la serie de informaciones y comentarios que se han hecho ver en distintos medios de comunicación a lo largo del presente gobierno respecto de distintas aristas que abordan la temática del medicamento y cambios en la regulación del mismo en nuestro país, es nuestro deseo y responsabilidad manifestar nuestra opinión técnica en los temas atingentes a nuestra futura profesión.
Entendemos entonces, los siguientes puntos de interés:
1.- Creación de la ANAMED (Agencia Nacional de Medicamento)
Chile, en vías a ser un país desarrollado, en constante expansión y crecimiento, no solo económico sino también cultural, se merece y necesita de un organismo independiente que vigile al medicamento y que sirva como un ente regulador del mismo. Un referente sanitario, el cual actuaría como su par norteamericano Food and Drug Administration (FDA) o ANVISA de Brasil. El hecho de que se genere un organismo regulador de estas características, con profesionales adecuadamente especializados y expertos en el área de medicamentos tiene un valor aún incalculable en cuanto a sus repercusiones en el manejo sanitario, epidemiológico y económico de las patologías en Chile, las cuales no debemos olvidar son tratadas en su gran mayoría con medicamentos. Creemos que se está apuntando en la dirección correcta y debemos incentivar no solo la creación de este organismo, sino su funcionalidad a través su autonomía, como lo debe ser una agencia de nivel internacional, desligada del vaivén de los gobiernos, y con lineamientos claros de lo que queremos del medicamento y el área farmacéutica en toda su amplitud, dígase la regulación de los actores que participan durante todo el proceso desde su confección hasta la entrega oportuna e informada al paciente, tocando claramente los puntos clave de acceso y calidad.
2.- Dispensación en dosis unitaria en las farmacias:
En el caso de que esta medida fuera adecuadamente implementada, sería un aporte sanitario enorme para el país. En primer lugar, facilitaría al Químico Farmacéutico la realización de atención farmacéutica y farmacovigilancia, ambas medidas que buscan mejorar la seguridad y efectividad del tratamiento para el paciente, mejorando el control epidemiológico de las reacciones adversas a medicamentos y el monitoreo de los problemas relacionados con medicamentos, permitiendo así el manejo individualizado de la terapia del paciente con la consiguiente retroalimentación con el personal médico. Además elimina la cantidad de medicamentos sobrantes de los tratamientos o faltantes en base a las a veces inadecuadas formas de envasado, lo cual toma gran relevancia al tratarse de fármacos antimicrobianos para efectos de la creciente resistencia bacteriana, tema reconocido como de extrema relevancia para el OMS/OPS, el Ministerio de Salud y la Sociedad Chilena de Infectología.
Creemos eso si hay que contemplar que esta medida requiere un gasto de recursos para su implementación, dineros que las cadenas farmacéuticas no tendrán ningún problema en solventar, pero a diferencia de éstas las cadenas pequeñas y farmacias de barrio (o comunitarias), que se han visto reiteradamente en condiciones desfavorable en un mercado tan concentrado como el actual, tendrán un dilema financiero. Es aquí donde creemos necesario por parte del Ministerio de Salud, ministerio a cargo de temas sanitarios en donde están insertas las farmacias, evaluar algún tipo de ayuda económica, ya que estas farmacias prestan un servicio irremplazable a la comunidad y debemos velar para que se mantengan como un centro sanitario, inserto en nuestras comunidades hace muchos años.
3.- En nuestro país existen 40 comunas sin farmacias comunitarias
Como gremio farmacéutico, creemos en el rol social de la farmacia comunitaria y en cómo es indispensable para la población como centro sanitario. Es por eso que proponemos una subvención por parte del estado para la instalación de farmacias en estas comunas, donde las condiciones no son atractivas desde el punto de vista económico para la instalación de éstas por parte de privados, pero entendiendo que en este caso lo más importante es el acceso de medicamentos de esta población, procurando la calidad de éstos y de una dispensación informada, más que los incentivos económicos dependientes de dicha necesidad. Por otra parte, existe la posibilidad de que estudiantes de último año del la carrera de Química y Farmacia cubran los turnos necesarios para abrir estas farmacias en un mecanismo similar al de los Generales de Zona, con la ventaja para el estudiante de adquirir un puntaje y postular a becas de postgrado o especialización. Esto último además de cumplir un rol social e incentivar el crecimiento personal, profesional e integral de los estudiantes, promueve el desarrollo intelectual en Chile y la posibilidad de formación de futuros magíster y doctorado para el aporte intelectual nacional.
4.- Receta médica con denominación de principios activos
Esta medida, junto con la exigencia de la realización de estudios de bioequivalencia a los medicamentos genéricos, sería la forma adecuada de garantizar a la población un acceso a medicamentos más económicos y, pero igualmente importante, de calidad, beneficiando directamente a las personas más humildes de nuestro país. Además, otorgaría más libertad al paciente para escoger el medicamento a utilizar entre aquellos de comprobada calidad y efectividad, evitando las ventas dirigidas hacia los medicamentos más caros.
5.- Venta de medicamentos fuera de las farmacias:
medida que pretende disminuir los precios en los medicamentos mediante el supuesto ingreso de nuevos actores en la venta de medicamentos (supuesto pues los dueños de grandes supermercados también tienen capitales y alianzas comerciales con las grandes cadenas farmacéuticas) constituye un error tanto como medida puramente económica como sanitaria. Una serie de argumentos validan nuestra posición, siendo lo más tangible lo observado recientemente en nuestro vecino país, Argentina. Si bien esta medida puede bajar inicialmente los precios de los medicamentos, esto sólo sucedería por un corto periodo luego de los cuales aumentan respecto del precio originalmente registrado, según lo visto en Argentina. Además debemos destacar el alarmante aumento en la tasa de intoxicaciones medicamentosas y en el número de muertes en base a reacciones adversas a medicamentos con todo el gasto estatal adicional que esto conlleva, el cual llega a cifras alarmantemente altas incluso en países desarrollados como lo es Estados Unidos.
Es importante pensar en las consecuencias de nuestras decisiones y por sobre todo pensar las políticas desde una mirada de estado. En este caso por ejemplo no solo debemos pensar en los medicamentos que saldrían en libre venta (los OTC), también debemos tener en mente los medicamentos que no saldrán, en este caso los medicamentos con receta que son los que la gente más necesita, en especial los pacientes crónicos. Con esto no queremos decir que estos deberían salir también, sino que debemos tener planes a corto, mediano y largo plazo que comprenda más que solo el punto de vista económico, sino también la salud pública y la calidad de vida de los chilenos, comprendiendo que la perdida de una vida no es algo a lo que se le pueda poner precio.
Es a partir de estos y otros temas que nosotros como Asociación Nacional de Estudiantes de Química y Farmacia (ANEQyF) debemos hacer hincapié en la necesidad tener una política de Estado con respecto a medicamentos. Se requiere un análisis profundo en cuanto al fondo y la forma, manteniendo una mirada crítica pero centrada en la salud como derecho fundamental. Es así, como queremos llamar a la atención y una discusión responsable respecto de un tema tan delicado y que requiere tanta experticia como es la regulación de los medicamentos, parte fundamental de la salud de la población, y poner énfasis en la mirada holística en estos temas que pese a que tienen un componente económico en muchas ocasiones, el acento debe ir en los pacientes, ciudadanos que esperan no solo se los mire como un numero inmerso en una estadística sino como personas que buscan salud, y nosotros como futuros Químicos Farmacéuticos de Chile tomamos el desafió de ser parte de un equipo de salud dispuesto a cumplir sus expectativas de manera responsable y por sobre todo ética.
Asociación Nacional de Estudiantes de Química y Farmacia de Chile.